En un mundo donde todos vamos corriendo, donde el frenesí del ritmo no nos deja aliento para dedicar un valioso tiempo para captar la atención de nuestros potenciales clientes o inversores, es donde entra la pregunta de si seríamos capaces de presentar nuestro negocio en solo un minuto. El discurso del ascensor, más conocido como elevator pitch, es la forma de llamar la atención de forma rápida y conseguir una cita para más tiempo. Y todo parte de la base de pensar que nos encontramos en un ascensor, y en lo que dura el viaje tenemos que convencer a nuestro interlocutor sobre nuestro negocio. Es sin duda un arma realmente eficaz para los negocios y también para la marca personal.
Está demostrada la eficacia del elevator pitch y no tiene porque ser de un minuto de duración, puede ser de más tiempo, dependiendo donde estemos exponiendo. Lo más importante es que tenemos que aprendernos bien nuestro discurso, disponer de un mensaje bien estructurado, claro y directo. Y por norma si se trata de captar la atención en un tiempo limitado que no sobrepase el minuto. Si después tu interlocutor quiere más, es que has conseguido tu objetivo.
Existen diferentes recomendaciones para crear tu elevator pitch ideal. Una de ellas es la que nos recomienda David Coursey que consta de solo 3 cosas para montar tu elevator pitch:
- A qué se dedica su empresa o proyecto.
- Cuales son los puntos diferenciales de tu proyecto, que es lo mejor, lo único y lo más favorable respecto a tus competidores.
- Dónde se puede conseguir más información o conseguir una reunión por más tiempo.
Otras preguntas que deberías responderte antes de crear tu minipresentación deberían ser las siguientes:
- Tienes claro cual es tu producto o servicio. Es importante.
- Cuales son tu mercados objetivos.
- Tienes un modelo de negocio claro, sobre todo para inversores será clave.
- Además de ti, quien más está detrás de tu empresa.
- Conoces a tu competencia, ¿quienes son?.
- Tus ventajas respecto a la competencia también son importantes.
También podemos citar las consejos de Ángel María en su blog:
- Ser concisos, transmitir pocas ideas. Lo importante es que quede muy claro.
- Despertar la curiosidad más que aburrir con datos. No es nada bueno dar muchos datos.
- Transmitir emociones, que te brillen los ojos cuando lo cuentes. Tienes que estar enamorado de tu proyecto.
- Explicar el mercado, la idea y el equipo.
- Termina con una invitación a pasar a la acción (dar la tarjeta, una posible reunión, enviar información ampliada…)
Y no puedo cerrar esta entrada sin recomendar el artículo de Alejandro Suárez en su blog en El Mundo que realmente es interesante y completo para ayudarte con tu elevator pitch. Creo que citando sus recomendaciones resumidas queda muy claro, sino puedes visitar tu artículo completo.
- Ensáyalo.
- Responde a las preguntas más obvias de entrada.
- El objetivo. Mentalízate de que el objetivo de esos minutos no es vender, sino captar atención.
- Cifras. No entres en detalles de cifras.
- Sé muy breve.
- Aprende a parar.
- No ser un «brasas».
- Sé coherente.
- Posiciónate.
- Conocimiento.
- Demuestra pasión.
- Haz los deberes.
- Si la oportunidad no llega; ¡generala tú!.
Además si buscas en Youtube encontrarás multitud de vídeos con ejemplos de como hacer un buen discurso de ascensor. Ahora a ensayar y practicar. Yo estoy practicando el mio para el Club de tu negocio, donde estamos aprendiendo como hablar en público mucho mejor. La imagen está sacada de esta entrada de gizmodo.